lunes, 29 de octubre de 2007

Una semana...

Una semana, solo una semana duro luego de su operación, por lo menos sin agonia ni dolor. Quien lo diria, UNA SEMANA!! A nadie le dio el tiempo de prepararse, de sentarse a pensar en el qué hacer cuando esto sucediera. Imaginense a mi abuela, su hijo mayor partió, es uno de los dolores más grandes que ha sentido luego de la muerte de mi abuelo hace mas de 40 años atrás.Mi mamá, mi mamita, pobre, tiene que llevar todo ese peso en su cuerpo para poder tranquilizar a mi abuela y a sus otros dos hermanos y ninguno de ellos sin poder hacer algo... ellos aca, en Chile, y su hermano alla en España. Quien lo diria.Pobrecita mi abuela, nunca se lo imaginó, tener que enterrar a su hijo antes que a ella.
La operación no era fácil. A sus 62 años de vida un tumor cerebral del porte de un buque lo hizo perder en parte un poco de memoria y tener tiritones en su mano. Lo operan y lo dejan durmiendo hasta que se despierte. En parte, un semi coma. Mi abuela, en cambio, cuando tenia 84 años de edad, se cae en la cocina (afortunadamente) y gracias a eso le descubren un estilo de derrame o hematoma que la tuvo mas de un mes hospitalizada y 2 grandes operaciones cerebrales, alucinaciones y quien mas sabe. Las cosas de la vida, la madre termino siendo mas fuerte que le hijo, y quien iba a pensar que lo que fallaria seria su corazón... MALDITA IRONIA!!!!!!!
Dios mio, por lo menos agradezco que tuve la posibilidad de conocerlo. En dos ocasiones: en mi viaje a Europa que aloje en su casa y cuando ellos viajaron y se quedaron en mi casa. Lo unico que recuerdo de esa venida es que le toco curar la pierna mordida de una amiga a causa de que se solto la cadena donde estaba amarrado mi perro.
Mañana lunes tenia una actividad que me tenia motivadisima, 0 nervios, demasiado contenta, pero la verdad, más que una linda oportunidad que me brindaron, mi posicion es al lado de mi familia. Nunca los he dejado y menos los voy a dejar ahora. No me lo perdonaria.
Y uno aca sin poder hacer nada, solo dar fuerzas a mi familia y tratar de ayudar lo mas posible. Por lo menos no sufrió, se fue en el sueño, tranquilito y sin dolor.
Lo unico que pude decirle a mi abuela sin llorar fue: "weli, imaginate, esta tranquilito, quizas ahora esta al lado tuyo despidientose de ti y mandandote besitos"

martes, 23 de octubre de 2007

Atardecer de amaneceres

Pediría el cielo nuevo de aquel que me abrió los ojos,
dio vuelta mi cabeza, tocó mi mente cambiándola de bando.
Pasó su mano por mi cabeza congelando mi cuerpo,
sintió el latido de mi corazón mezclándose con el suyo.
Cantó a la vida una noche de luna estrellada,
soñando con ver a la mujer,
a esa dama que lo enamoró una tarde de arena,
una noche de música,
hablándole del tiempo y el amor.
Pidió el tiempo un nuevo encuentro,
rogándole al Padre su unión.
Pidió por la alegría de su apagado corazón.
Lloró al mar mil lágrimas que no piensan en volver.
Sonrió hacia aquel deseo eterno de ver su cuerpo aparecer.
Bebió gotas de amargura, unas cuantas de dolor,
cinco copas de dulzura, siete onzas de pasión.
Nueve sopas de alma de niño y una sopa de unión.
Esperó un tiempo y la vio,
sentada en el atardecer que ese día terminó.

Sueños

¿A quién puedo contarle mis sueños si cuando los cuento no logran cumplirse?
Mejor dormir soñando. Soñar no cuesta nada, uno no se cansa ni se agota; solo vuela en la mente de la imaginación.

Cuento de angeles

Se escuchan pasos a lo lejos de alguien que llama para que entre en él. Se acerca, se detiene, se posa al frente y le extiende su mano cálida para que la tome entre las suyas. La lleva por un viaje sin rumbo ni futuro. Se detiene, la observa sin pronunciar palabra alguna. Prosigue su camino junto a ella; le suelta la mano, la toma en sus brazos y se eleva al cielo. Mientras vuelan se voltea, la mira a los ojos y sigue el camino que le tiene destinado.

Cuando se detienen en una nube, sin dejar de mover sus alas, le dice: "si quieres llenarte de luz, toma mi mano y sígueme". La toma sin pensarlo y la eleva al infinito en un recorrido sin final.
Cuando se posaron sobre las flores que los sostenían, miraron a su alrededor con la esperanza de encontrar a algún otro ser, pero se encontraron con la sorpresa de que se encontraban sólo ellos.

Pasó el tiempo entre hojas, agua, flores y sol y aun no encontraban seres con características similares porque, aunque no lo querían, necesitaban de alguien con quien pasar algun momento del día. Vivían cada minuto descubriendo nuevos horizontes, ya que cada día había algo nuevo que descubrir. Pero cuando llegaron a un lugar completamente desconocido ante sus ojos, se maravillaron con la hermosura de tan utópico lugar.

Empezaron a recorrer sin rumbo fijo, hasta que llegaron a una laguna de estrellas rodeada de nubes de los distintos colores que pintan el firmamento, pero se dieron cuenta que, al centro de ésta, habían dos estrellas que brillaban más que las otras. Se miraron y caminaron hacia ellas, posándose cada uno en una estrella que, al segundo después, se elevaron juntas llevándolos entre las nubes del paraíso hacia un nuevo destino: el infinito.

Creyeron que el viaje sería corto, como los que habían tenido anteriormente, pero se dieron cuenta que sería largo y que les quedaba tiempo para descubrirse el uno al otro.

Mientras seguían su recorrido hacia el infinito, miraban a su alrededor buscando seres que los acompañaran en su camino. Encontraron muchos en las distintas estrellas y galaxias que cruzaron, mas ninguno se acercaba a lo que ellos buscaban y tampoco sentían que fueran compatibles.

Luego de un haz de luz, pararon a descansar sobre una pradera de luces en donde ellos, agotados por el viaje, se echaron a descansar y su sueño se unió en uno solo, en donde aparecían corriendo por valles de colores que los hacía cada vez más felices. Observaba y corrían por pastos multicolor hasta que encontraron un arcoiris. Con gran curiosidad, subieron por ella de la mano y se encontraron con la sorpresa de que aquellas líneas de colores seguían sin fin: en sueños habían llegado al infinito.

Despertaron luego de un hermoso sueño; se levantaron, miraron a su alrededor y sintiern que, al haber soñado con aquel lugar con el que ellos tanto anhelaban y no haberlo hallado ante sus ojos, aquel lugar tan lejano de su propia mente, desconocido en cuerpo, pero conocido en utopía, estaba muy lejos de ser encontrado.

Se sentaron desilucionados y sin esperanza alguna de encontrar y alcanzar aquel espacio que llenaba sus almas y los cegaba, ya que aquel sueño que tuvieron era, para ellos, inalcanzable.
Sin nada que poder hacer en ese minuto, se levantaron y recorrieron por unos momentos lugar en donde se encontraban y, sin aguantar las ganas, se abrazaron, se tomaron de las manos y corrieron para sentir aquella libertad que no sentían hace tiempo y disfrutar de ese aire puro que los rodeaba y los llenaba de cierta paz tranquilizadora.

Cuando se cansaron de correr, se miraron y caminaron cada uno a sus estrella, en donde se tomaron de las manos y continuaron el viaje hacia el lugar de sus sueños.

lunes, 22 de octubre de 2007

Cambios...

Existe el cambio de pensamientos, cambio de pareja, cambio de casa, en fin, distintos tipos de cambios que una persona normal puede experimentar a lo largo de su vida, pero uno de los cambios más difíciles que me ha tocado vivir ha sido este último: el pasar de ser una estudiante a ser una persona buscando encontrar su centro en sí misma, dejando de lado caras y palabras para ver realmente lo que me depara el futuro y la vida que llevo conmigo.

Si bien en estos minutos me encuentro buscando trabajo, un poco desconcertada, aburrida y algunas veces frustrada, tambien me he dado el tiempo para pensar el por qué me ha tocado vivir esto. La respuesta a la que he llegado (y que se la he echo saber a muchos de los que me rodean), es que quizas alla afuera me está esperando algo fuera de mis expectativas, algo bueno, llenador, algo que no espero o, simplemente, este no era mi camino y tengo que dedicarme a lo que realmente siento en mi interior, pero eso nunca lo sabré hasta experimentar lo que significa el mundo laboral. No quiero decir que lo que estudié no me gusta, al contrario, me llena y me encanta, pero es difícil saborear y tomarle el gustito que significa sin antes no haber pasado por la experiencia.

Los cambios que he experimentado en mi interior a raiz de este camino es fuerte; es totalmente un minuto de autoconocimiento y de fortaleza propia el haber descubierto muchas cosas que anteriormente nunca podría haber sabido de mi. La oportunidad que me ha entregado la vida de poder verme a mi misma sola y tranquila hacia mi interior es algo que anteriormente, en el ajetreo entre pruebas, amigos, universidad y cosas, no hubiera podido experimentar y, como dije en algun minuto, este es un renacimiento de mi misma como persona independiente de otras, sin necesidad de tener al lado a alguien que te diga loque tienes que hacer o no hacer, esto va por mi propia cuenta, y si no han tenido la posibilidad de darse cuenta... dense un tiempo para si mismos, venase para adentro y recuerden que cada uno es el agente de cambio que propiamente se necesita para cambiar...